imagen glosa

Breve aproximación cronológica de los hechos:

El 11 de abril de 1995 y tras mantener una conversación personal con el director de relaciones sociales de la Fundación Cultural Bancaixa, escribo una carta al director de esta entidad explicándole que soy un humilde coleccionista de obras de arte y que quiero ampliar mi colección con las reproducciones fotográficas de los cuadros y elementos artísticos y decorativos que cuelgan de las paredes de las sucursales de Bancaixa en la ciudad de Valencia. Le explico que para ello necesitaré recorrer todas las sucursales de Bancaixa fotografiando dichos objetos, por lo que necesito su consentimiento para llevar a cabo esta actividad en las próximas semanas.

Un mes más tarde y tras la falta de respuesta por parte de Bancaixa a mi solicitud, decido llamar al director de relaciones sociales de la Fundación Cultural Bancaixa. Tras mucho insistir se pone al aparato. Me explica que a pesar de sus denodados esfuerzos por convencer a la junta directiva del interés de mi colección, estos no han tenido a bien conceder el permiso ya que no pueden entender cómo alguien puede estar interesado en las obras sin valor que cuelgan de las paredes de las sucursales, cuando ellos organizan exposiciones prestigiosas como la recientemente dedicada a Sorolla o la que en esos momentos –"Pintores Españoles durante el reinado de Felipe IV"- ocupa sus salas. Algunos días más tarde recibo una carta de Bancaixa explicándome que "no han creído oportuno acceder a mi solicitud, máxime cuando nos encontramos en un momento de renovación de nuestras oficinas y de su renovación".

Decido en ese momento que la negativa no va a echar por tierra mis deseos de coleccionar tales reproducciones. Dos días más tarde comienzo junto a una ayudante un recorrido por noventa y nueve sucursales de Bancaixa en Valencia. Durante las visitas trato de fotografiar (casi siempre sin éxito desgraciadamente) las obras que son objeto de mi colección. Durante las visitas a las sucursales también anoto múltiples datos sobre la sucursal así como las anécdotas que se han producido durante la visita.

Unas semanas más tarde finalizo la instalación de mi "gabinete de aficionado". En sus paredes he montado los diferentes marcos que deberían haber albergado las obras de mi colección. Desgraciadamente estos marcos se encuentran vacíos salvo en cinco casos:

  • Reproducción de "El sueño de Jacob" de Rivera que colgaba malamente en la pared de una sucursal con unos adhesivos y que me pude llevar sin que nadie me lo impidiera.
  • Imagen de la "Virgen de los Desamparados", que se encontraba en varias sucursales y que pude adquirir fácilmente en tiendas turísticas.
  • "El Balandrito" de Sorolla, reproducido en un póster que pude despegar de una pared en un alarde de destreza y sangre fría.
  • "El sacerdote Ajimelec le entrega el pan y la espada a David" de Juan Antonio de Frías y Escalante. En este caso pude fotografiar el póster que se encontraba tras los empleados de la sucursal.
  • Reproducción de un mapa del Siglo XVII de W.J. Blaeu, -que se encontraba junto a un extintor, un bedel y un cenicero,- exactamente igual a otro que yo tenía en casa desde hacía años.
  • Obra gráfica de autor desconocido que pude fotografiar en condiciones dificilísimas.

Algunas fichas que recogen mis experiencias durante las visitas a las diferentes sucursales.

Ficha 58.

Nombre de la sucursal: Ingenieros. Número de la sucursal: 056

Dirección: C/ Uruguay 55

Pues bien, en esta sala he tenido la experiencia más turbadora de todas las vividas hasta la fecha desde que tomé la decisión de convertirme en un coleccionista. Parecía una sucursal como las demás. La hora de la visita, mediodía, me hacía prever que algunos clientes estarían haciendo gestiones financieras. Entré confiado, con la despreocupación que da el realizar una acción que ya se ha hecho muchas veces. Y cuando me di cuenta, ya era tarde. Me hallaba en medio de la sucursal, solo, y era el centro de las miradas de todos y cada uno de los empleados. Comprendí entonces que mi aspecto no debía de ser normal, a pesar de que para las visitas decidí vestir de forma elegante: pantalón de tela, camisa blanca, zapatos y la única chaqueta que habita en mi ropero. Entendí que algo no encajaba en mi aspecto y me hacía sospechoso. Quizás mi barba, mi pelo un poco largo, tal vez el polvo de los zapatos por los kilómetros recorridos…, nunca lo sabré a ciencia cierta. La sala contenía un par de óleos, decidí dirigirme a ellos, les eché un vistazo y tras una breve indecisión salí de la sucursal. Una vez fuera y sin que me haya dado tiempo a tranquilizarme me aborda uno de los empleados y me pregunta que para qué he entrado. En la espesura de mis pensamientos decido decirle la verdad. Que soy un coleccionista de arte interesado en las obras que cuelgan en las paredes de las sucursales de Bancaixa y que estoy haciendo una revisión de las mismas.

Me mira.

Le miro.

Nos miramos.

Mientras me alejo me pregunto: ¿quién está en lo cierto?

Ficha 65

 

Nombre de la sucursal: Conchita Piquer. Número de la sucursal: --

Dirección: C/ Conchita Piquer 10

 

Sobre uno de los cristales de la entrada principal se ha pegado un cartel que reproduce un cuadro de Joaquín Sorolla y que anuncia una exposición de este pintor en la Fundación Bancaixa. A pesar de estar siendo apuntado directamente por una cámara de vigilancia no dudo en despegar el cartel y salir, lentamente, cediendo el paso –en una genial demostración de seguridad y sangre fría- a una señora de mediana edad. La alegría que siento en este momento al poder conseguir una pieza para mi colección compensa con creces los muchos malos ratos vividos.

Interesado en encontrar datos sobre la nueva pieza acudo al volumen dedicado a Valencia de la colección "Tierras de España" que, editado por Noguer ha sido coordinado por: José María de Azcárate Ristori, Catedrático de Historia del Arte Medieval, árabe y cristiano de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid. José Cepeda Adán, Catedrático de Historia Moderna de España en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid. José Gudiol, arquitecto, Director del Instituto Amatller de Arte Hispánico. Antonio López Gómez, Catedrático de Geografía de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Madrid. Juan Maluquer de Motes, Catedrático Director del Instituto de Arqueología de la Universidad de Barcelona. Gratiniano Nieto Gallo, Catedrático de Arqueología, Epigrafía y Numismática de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Madrid. Francisco Yndurain Hernández, Catedrático de Lengua y Literatura Española de la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid. En la parte dedicada a Sorolla, incluida en la sección Arte, puede leerse un texto de 1.192 páginas que se distribuyen a lo largo de cuatro páginas, ciento noventa y un líneas y siete columnas. Gozoso, colocaré la pieza de Sorolla en mi colección. Debo decir que su título es "El Balandrito". Quisiera haber hecho algún comentario sobre Concha Piquer pero el hallazgo de la obra de Sorolla me lo ha impedido.